viernes, 27 de noviembre de 2015

Origen del estrés

            Según Acosta (2008) desde la prehistoria, el estrés ya se presentaba en el hombre al tener que luchar contra el peligro, o para huir al tratar de conseguir el alimento y al final, le permitía sobrevivir.

Tanto el hombre como la mujer experimentaban un sentimiento común que denotaba agotamiento, que resultaba de la exposición prolongada al frio, al calor, a la pérdida de sangre o a cualquier tipo de enfermedad, y posiblemente descubrieron que la respuesta a un esfuerzo extenuante y prolongado se presentaba por etapas: primero experimentaban una situación difícil, luego se acostumbraba a ella, y por último, no podían tolerarla (Bravo y cols., 1988).

Desde el principio del mundo el hombre han tenido que experimentar cambios a los cuales es difícil adaptarse fácilmente y a situaciones que superan la capacidad de que el individuo pueda sobrellevar acontecimientos estresantes, por esta razón, desde siempre se ha sufrido del estrés, solo que no pudieron explicar con claridad sus experiencias en términos científicos, pero de la misma manera han aprendido a resistir y a desarrollar habilidades para enfrentar situaciones de desafío, del mismo modo han experimentado los efectos perjudiciales del estrés excesivo y prolongado. Jean Taché, Yvette Taché y Hans Selye (citado en Kagan, 1976)